NI SI QUIERA CON UNA ESTRELLA hay que calificar a l@s complices que se albergan en esta sala cuna, en donde el trato de las auxiliares, educadoras de parvulo es indignante hacia seres que ni siquiera pueden defenderse. la bestia que sacudía a ese pobre bebé de meses en su silla nido, no tiene perdón de Dios
NI SI QUIERA CON UNA ESTRELLA hay que calificar a l@s complices que se albergan en esta sala cuna, en donde el trato de las auxiliares, educadoras de parvulo es indignante hacia seres que ni siquiera pueden defenderse. la bestia que sacudía a ese pobre bebé de meses en su silla nido, no tiene perdón